En las trochas fronterizas funcionan ‘aduanas’ ilegales que cobran por el ingreso de mercancía de contrabando hacia el país vecino. El contrabando cambió de dirección. Hasta hace un poco más de cinco años a Cúcuta y el área metropolitana llegaba gran cantidad de mercancía venezolana, por los bajos precios, pero ante la crisis económica que se vive en el vecino país ese mercado se acabó y ahora las grandes mafias se mueven de Colombia hacia Venezuela. ¿Pero cómo hacen para que las mercancías lleguen desde Cúcuta hasta las poblaciones venezolanas, a pesar del control en los puentes binacionales y que la frontera esté cerrada? Palma -coincidiendo con las autoridades colombianas- aseguró que todo se da a través de una red de distribución que comienza en las trochas y pasa por mayoristas y distribuidores hasta llegar a los establecimientos que, como el de ella, los ofrecen al público de manera detallada. Un habitante de este punto de la zona rural de Cúcuta también aseguró que en las madrugadas se escucha el movimiento de muchos camiones que van hacia las trochas de la frontera, donde descargan los productos que luego son vendidos al por mayor en los establecimientos del lado venezolano.