El Tren de Aragua, banda criminal a la que a pesar de que la Policía Metropolitana de Cúcuta (Mecuc) le ha propinado varios golpes, debilitándola, vuelve a resurgir, como si se tratara de un ‘monstruo de mil cabezas’. Hoy, esta banda criminal está enquistada en esa zona fronteriza, donde a diario deja una estela de miedo, muerte, desolación y pobreza. Pero, ¿hasta cuándo durará este imperio del terror que logró montar el Tren de Aragua? “Esa es una pregunta difícil de responder, porque cada vez que capturamos a algunos de sus miembros, quedan uno o dos sujetos sueltos, que se encargan de prepararle el camino a otros bandidos que envían desde Venezuela y vuelven a reorganizarse”, aseguró una fuente cercana a las pesquisas contra esta organización. Las autoridades consideran que esta banda ha resultado ser más sanguinaria que todas aquellas que en los últimos 10 años han desarticulado en esa población que colinda con San Antonio del Táchira (Venezuela). Además, según las autoridades, para pertenecer a ella se debe ser venezolano y “comprobar que no le tiene miedo a la muerte, por eso todos deben saber cómo matar, no solo con arma de fuego, sino con cuchillos”.