En términos médicos,cuando ocurre una separación de los seres queridos, los niños pueden sufrir liberación elevada de hormonas del estrés como el cortisol y la adrenalina. No obstante, en algunos niños no termina en arrebatos ni berrinches, sino que permanece en silencio, casi invisible. “No hay que subestimar estas actitudes”. En Norte de Santander residen 167.958 venezolanos, según el último informe publicado por Migración Colombia, el mes pasado. Aunque no hay datos precisos sobre el número de niños, se estima que representan el 27% de dicha población: unos 33 mil menores.