Costa Rica, Panamá y República Dominicana, países de tránsito de miles de migrantes que buscan llegar irregularmente a Estados Unidos, establecieron una alianza estratégica con Washington para “atender las causas estructurales de la migración”, informaron el lunes sus gobiernos. El acuerdo se alcanzó en San José durante la IV Cumbre de la Alianza para el Desarrollo en Democracia (ADD), que agrupa a los mandatarios de estos tres países de América Latina. Sus territorios son utilizados por migrantes que suben desde América del Sur y el Caribe, mayoritariamente haitianos que dejaron su país en los últimos años, aunque también venezolanos, cubanos y africanos. Su destino es Norteamérica. “Como aliado, el país norteamericano contribuirá en los esfuerzos de la Alianza para atender las causas estructurales de la migración”, señala un comunicado conjunto firmado por los mandatarios Laurentino Cortizo de Panamá, Luis Abinader de República Dominicana y Carlos Alvarado de Costa Rica. En representación de Estados Unidos estuvieron el secretario de Estado Adjunto para Crecimiento Económico, Energía y Medio Ambiente, José Fernández, y el jefe de la diplomacia estadounidense para América Latina, Brian Nichols. Una de las acciones del convenio entre la ADD y EEUU será crear un “fondo especial” para atender las causas de la migración.