Según la entidad, durante este fin de semana, se tenía programado habilitar cinco polideportivos en diferentes barrios de la ciudad, los cuales no se han instalado por diferentes circunstancias. En primer lugar, el rechazo de los habitantes y vecinos de las zonas escogidas para la instalación de estos albergues, y en segunda instancia, porque no se han verificado los puntos que serían habilitados. Para ello se requiere la valoración de entidades como la Cruz Roja y la secretaría de salud, que verifíquen que los espacios cuentan con las normas de salubridad necesarias para su ocupación. Quienes más requieren del tipo de asistenia que ofrece un albergue temporal son los miles de venezolanos que no tienen hogar o que han sido expulsados de los precarios hoteles, los llamados paga diarios, donde conseguían pasar la noche a cambio de montos irrisorios que conseguían rebuscándosela en las calles. Pero ahora que la ciudad está paralizada esa posibilidad se extinguió. También serían beneficiaciarios de los albelgues los desposeidos nacionales que no tienen más opción que dormir en parques y calles donde los sorprenda la noche.